Claves para limpiar tu silla de escritorio

La limpieza de tu silla de escritorio es clave para prolongar al máximo su tiempo de vida. Conoce los pasos que necesitas seguir para obtener los mejores resultados y mantener una oficina impecable.

La limpieza de oficina es un punto clave para cualquier empresa, pues no solo mantiene su imagen, sino que procura el bienestar de sus colaboradores. Sin embargo, lograr el cometido de mantener una silla de escritorio en las mejores condiciones, puede llegar a considerarse complicado. 

Esto debido a que, a lo largo del día, pueden darse una serie de situaciones inesperadas. 

Ya sea como empleador o como empleado, debes reconocer el valor de una silla de escritorio impecable. 

Por qué es importante la limpieza de tu silla de escritorio 

Una silla de escritorio, con el mejor mantenimiento, te permitirá trabajar en la misma posición durante períodos de tiempo prolongados sin afectar de forma severa tu columna vertebral. 

Estas sillas están diseñadas de manera ergonómica, por lo que cuidan tu salud, postura y bienestar. Pese a ello, una silla de escritorio mal cuidada tendrá como consecuencia la incomodidad y posibles dolores en espalda y columna. 

¿Aún no sabes cómo cuidarla? ¡Nosotros te decimos!

Cómo limpiar tu silla de escritorio 

Para cuidar del correcto mantenimiento de tu silla, lo principal es conocer los pasos adecuados para limpiarla, pues cada una es diferente. 

A continuación, te traemos la guía definitiva que necesitas integrar en la limpieza de tu oficina para cuidar bien de tu silla: 

Limpia las manchas

Para deshacerte de las molestas manchas, lo primero que necesitas es conocer las necesidades de tu silla. 

Algunos materiales necesitan de cuidados especiales, esta información puedes obtenerla en sus etiquetas o instructivos. Si no se indica lo contrario, puedes recurrir al jabón y el agua tibia. 

Debes tomar en cuenta que algunas manchas pueden ser más difíciles de tratar. Como tip, te recomendamos dejar un poco de jabón directo en la mancha con una toallita seca hasta que desaparezca completamente. 

Aspirar el polvo

Para tu silla, el polvo es uno de sus principales enemigos, pues si no se retira constantemente, puede acortar su vida útil. 

Dentro de tu rutina semanal de limpieza, debes integrar el retirar el polvo acumulado con ayuda de una aspiradora a baja potencia. Asegúrate de pasarla por el asiento, respaldo y los reposabrazos.

Aplica acondicionador

Algunos materiales, como la piel y la polipiel, necesitan de la aplicación de un acondicionador cada pocos meses para mantener su buen estado. 

Este excelente producto protege tu silla de diversos daños, en su mayoría aquellos causados debido a la sequedad. Estos están diseñados para hidratar el material gracias a sus extraordinarios componentes. 

Limpia y lubrica las ruedas 

Para limpiar las ruedas y que su movimiento sea suave, puedes comenzar desmontándolas para facilitar el trabajo. 

Utiliza una herramienta útil para raspar los residuos que estén obstruyendo el movimiento de la silla. También puedes ayudarte de una aspiradora o aire comprimido.

Si buscas que tu silla se mueva con mayor suavidad, después de limpiar puedes aplicar a las ruedas un poco de lubricante. Repite el proceso cada seis meses 

Inspecciona la sujeción de las piezas 

La sujeción de los componentes de tu silla es muy importante, pues si no lo inspeccionas de forma regular, podría ocasionar que se vuelva inestable. 

La cantidad de piezas dependerá de cada modelo, tu principal trabajo es identificarlas y asegurar que estén correctamente apretadas. 

Utiliza un destornillador para mantener la sujeción en su mejor estado. Recuerda que debes inspeccionar este punto con regularidad.

Reemplaza el pistón 

Si cuentas con una silla de altura ajustable, una pieza que no puedes olivar es el pistón de gas. 

Esta pieza se encarga de crear un elevador neumático, pues en su interior se encuentra gas nitrógeno presurizado, lo que permite a la silla elevarse y sostenerse. 

Si este comienza a fallar, tu silla no podrá levantarse, por lo que será el momento indicado para cambiarlo.

Mantén tu silla alejada de la luz solar 

La luz solar ultravioleta es un peligro para los materiales de tu silla, pues estos pueden degradar la mayoría de las telas. 

Por ello, la mejor acción que puedes tomar es mantenerla alejada de espacios donde de directo la luz solar. 

Por supuesto, este proceso no sucede con rapidez, sin embargo, una exposición al Sol durante un periodo largo, terminará por secar la tela.

Reemplaza cuando sea necesario 

Recuerda que todo tiene un tiempo de vida. En el caso de las sillas de escritorio, es aproximadamente entre siete y quince años. 

Por otra parte, una silla que está demasiado dañada debe ser reemplazada a pesar de las tareas de limpieza y mantenimiento. 

Recurre a expertos

El mejor consejo para prolongar el tiempo de vida de tu silla de escritorio, es obtener la ayuda de un experto. 

Un servicio especializado está completamente preparado para identificar las necesidades de tu silla, de acuerdo con los materiales que la componen como el tipo de telas o pieles. 

Una limpieza descuidada puede provocar rupturas en el material o nuevas manchas, entre otras dificultades, por lo que dejarlo en manos de un experto te garantiza un resultado de calidad. 

Finalmente, recuerda que uno de los aspectos clave en la limpieza de tu oficina es la calidad. 

Pasos sencillos cómo limpiarla, alejarla del Sol y evitar elementos que puedan dañarla, hacen la diferencia para tu silla. 

Para tener una silla de escritorio como nueva, una buena rutina de limpieza es imprescindible. Si deseas lograr un mejor resultado de calidad, cuidando al máximo los mejores materiales, contacta a un experto. 

Te sugerimos continuar perfeccionando tus rutinas de limpieza, descubre trucos para mantener tu alfombra impecable.